Exploradores completan un proyecto de simulación de polipasto con el Local 627
LOS OBJETIVOS DE los niños exploradores y los Boilermakers se combinaron perfectamente cuando los Niños Exploradores de América del Consejo del Gran Cañón (Boy Scouts of America Grand Canyon Council) se reunieron con el Local 627 (Phoenix) y el Programa de Aprendizaje de los Estados del Occidentales. Los exploradores cumplieron su objetivo de proporcionar a sus miembros programas orientados hacia una carrera en asociación con organizaciones comunitarias. El local tuvo una audiencia de jóvenes, futuros aprendices para educar. Y los exploradores ganaron sus insignias de mérito de Diseño y Construcción de Modelos.
Dieciocho exploradores, entre las edades de 13 a 18 años, y algunos padres se reunieron en el salón sindical y centro de capacitación de aprendices en Phoenix un sábado por la mañana para descubrir las múltiples habilidades que pueden adquirir los Boilermakers y los beneficios de unirse a un sindicato.
La clase de cinco horas comenzó con el gerente de negocios/secretario-tesorero del L-627, Jacob Evenson, dando una breve introducción a las trayectorias profesionales que puede tomar un Boilermaker, incluyendo la forma en que una persona podría participar en el programa de Ayudante de los Estados Occidentales (Western States Helper Program) y el Programa Nacional de Aprendizaje de los Boilermakers (BNAP, por sus siglas en inglés). Para que sus palabras cobraran vida, Evenson mostró a los exploradores dos videos: “Boilermakers — Esta es Nuestra Historia” y “El Programa de Ayudante Innova”.
Gary Bain del Local 627 y cuatro aprendices lideraron grupos en un ejercicio de entrenamiento práctico para un proyecto de simulación de polipasto. Los instructores repasaron el análisis de seguridad en el trabajo y cada grupo obtuvo un plano del proyecto.
Los Scouts midieron los materiales de construcción precortados y los combinaron con la información del plano. Después de que cada explorador se colocara un equipo de protección personal, se turnaron para soldar y adaptar el polipasto.
“Además de aprender un oficio, fue bueno para los niños trabajar en grupo hacia un objetivo común. Tuvieron que negociar quién hizo qué y cuándo”, dijo Trish Sierra, madre de tres exploradores.
“Me sorprendió la cantidad de cosas que hacen los Boilermakers”, dijo William Sierra, de 13 años. “La clase fue genial porque no se trataba solo de personas hablando, eso es aburrido. Me gustaron los videos y trabajar con mis manos”.
“Brindamos una forma activa de enseñar a los jóvenes y sus padres sobre las muchas oportunidades que se abren a un Boilermaker”, dijo Evenson, señalando la importancia de ofrecer clases regularmente a grupos de la comunidad local, como los exploradores.
El L-627 planea ofrecer tres cursos más de insignias de mérito de Diseño y Construcción de Modelos durante el próximo año.