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Recordando el número 17

Mary Claire, Julianna y Jack Borzell

Familia del Local 13 mantiene viva la memoria de su hijo con filantropía

EL AGENTE DE NEGOCIOS JUBILADO Jack Borzell, su esposa Mary Claire y su hija Julianna, han convertido la trágica pérdida trágica de su hijo y hermano John en una misión positiva de honor y recuerdo.

John “Beno” Borzell perdió su vida el 3 de septiembre del 2011, en un accidente de motocicleta. Como prometedor joven atleta, John llevaba el número 17 en su camiseta de fútbol y en su uniforme de béisbol. A pesar de que John estaba siendo evaluado para una beca deportiva ende varias universidades, su pasión por el aire libre lo llevó a cursar una licenciatura en ciencias de la tierra y el medio ambiente en la Universidad de Wilkes ende Wilkes-Barre, Pennsylvania. Su accidente fatal ocurrió apenas cuatro meses después de su graduación. Él tenía 22 años.

Los Borzell quieren que continúe el legado de la personalidad y el entusiasmo por la vida de John, y así se dedicaron a recaudar dinero para un fondo de becas. Jack, un miembro jubilado del Local 13 (Filadelfia), junto con su esposa e hija, iniciaron una exitosa recaudación de fondos con golf en nombre de John en el 2012. El año pasado, el 17 de septiembre, el torneo contó con la participación deatrajo a 144 golfistas. El evento atrae a participantes de la industria de la construcción, incluyendo Boilermakers, otros oficios sindicales sindicatos y contratistas. Muchos de los amigos de John también participan. El torneo agotó sus entradas en los últimos dos años y ya se han vendido todas para el 2017.

Diecisiete graduados de la secundaria del área de Wyoming, alma mater de John, han obtenido becas - $1,700 dólares por estudiante - para representar el número 17 que John usó durante sus años allí.

Algunos de los esfuerzos de recaudación de fondos de los Borzell se dirigen a un laboratorio de química ambiental en el nuevo edificio científico de la Universidad de Wilkes. “Nos decidimos por la sala en el centro de ciencias porque él siempre quería ayudar a otros estudiantes”, dice Julianna. “Al tener este laboratorio que lleva su el nombre de él, esta era una de las maneras en que podía seguir haciéndolo, a pesar de que él ya no esté”.

En el 2017, la familia hará su último pago al laboratorio que lleva eln nombre de John. El pago se hará en el Día de la Tierra del 2017 como un homenaje al amor de John por la naturalezael aire libre y el medio ambiente.

Mantener vivo el nombre de John es importante para los Borzell. Como Jack recuerda, poco antes de su muerte, John le dijo a su madre, “voy a hacer un nombre porara mí mismo.”

“Lo estamos manteniendo así”, dice Jack, refiriéndose al torneo de golf, laboratorio de ciencias y becas.

Esta historia es adaptada, con permiso, de un artículo de la revista de la Universidad de Wilkes.

Para contribuir al torneo de golf, comuníquese con Jack Borzell a jbor13@comcast.net.